Oiga!
TOLUCA, México, 26 de Marzo de 2023.- Los millonarios desvíos de Delfina Gómez Álvarez al frente de la Secretaría de Educación Pública (SEP) del gobierno federal han cobrado su primera víctima: la conserje de una escuela de Ecatepec resultó herida de gravedad al desplomarse el techo que fue “remodelado” cuando la ahora candidata de Morena a la gubernatura mexiquense era titular de la dependencia, debido a los materiales de mala calidad que usa la 4T en todos sus proyectos.
Delfina fue señalada por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) por el desvío de 830 millones de pesos de recursos de la Secretaría de Educación Pública, sin que se sepa dónde fueron aplicados.
Esto se suma a las críticas por el uso de materiales de mala calidad en las obras que realiza Morena y los gobiernos afines a la 4T.
Además de las deficientes obras, la ASF reportó que con los 13 mil 500 millones de pesos otorgados a Delfina para el programa La Escuela es Nuestra se pagaron boletos de avión, gastos hospitalarios, préstamos personales, televisión por cable y alimentos, y no se comprobó que los recursos fueran aplicados a las obras escolares.
Sin embargo, Delfina Gómez Álvarez solicitó una ampliación presupuestal para dicho programa, para tener 30 mil millones de pesos, que, se presume, serían desviados a su campaña electoral en el Estado de México.
La corrupción de Morena en las obras públicas que se simularon con el programa La Escuela es Nuestra provocaron el desplome del techo del Jardín de Niños “Amayali”, en Ecatepec, que cayó sobre la conserje, quien resultó herida de gravedad.
La directora del plantel, Guadalupe Salazar Lucio, acusó que el gobierno federal, a través de sus programas clientelares, dejó en manos de los Siervos de la Nación la supervisión de obras en las escuelas, sin tener los conocimientos técnicos para hacerlo, provocando las fatales consecuencias que provocaron los graves daños a la salud de la conserje de la escuela.
La docente acusó que el gobierno federal, por ahorrar dinero, está haciendo obras deficientes, que, en este caso, pusieron en riesgo la vida de los pequeñitos que acuden al plantel a tomar clases, pues de haber caído el techo en horario escolar, la tragedia habría sido mayúscula.
